‘Truth Hurts’: Lizzo es demandada por acoso sexual

Lizzo es considerada como una de las figuras más representativas del ‘body positive’ y del amor propio. Ahora, su imagen se derrumba poco a poco a causa de una demanda que expone el presunto acoso sexual y laboral que ejerció sobre tres de sus bailarinas. Y no solo eso, también se le acusa de humillarlas, ridiculizarlas y avergonzarlas sobre sus pesos.

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El Tribunal Superior de Los Ángeles tiene una demanda contra la coreógrafa Shirlene Quigley y Melissa Viviane Jefferson, mejor conocida como Lizzo, en donde se les acusa de presionar a sus ex-bailarinas, Arianna Davis, Crystal Williams y Noelle Rodriguez sobre temas sexuales. 

“La naturaleza deslumbrante de cómo Lizzo y su equipo trataron a sus artistas parece ir en contra de todo lo que Lizzo representa públicamente, mientras que en privado averguenza a sus bailarines y los degrada de maneras que no solo son ilegales, sino absolutamente desmoralizantes”, declara el abogado de las bailarinas.

En una ocasión, Lizzo presionó a una de ellas para que tocara a un artista desnudo en un club de Ámsterdam a principios de 2023. Ésta se negó, la cantante arremetió contra ella y la presionó más. Al final, la bailarina terminó por acceder, pero Lizzo y su equipo comenzaron a reírse.

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“Las demandantes estaban horrorizadas por la poca consideración que mostraba Lizzo por la autonomía corporal de sus empleados y quienes la rodean, especialmente en presencia de muchas personas a las que ella empleaba.”

Tras negarse a ese tipo de participaciones, las obligó a tener una “audición insoportable” por horas, sin dejarlas descansar o ir al baño “para infundir miedo”.

Además, “hostigaba a sus bailarines para participar en actos sexuales” y las incitaba a “atrapar los consoladores lanzados desde las v*ginas de las artistas y comer plátanos que sobresalían de sus v*ginas”. Así pasó en un club nudista en Paris, donde accedieron a ir con engaños, por lo que adentro, sólo obligó a la bailarina Davis a tocar los s*nos de una de las mujeres.

Las personas que aceptaban ir a esas fiestas recibían un “trato preferencial con mejores prestaciones laborales”.

Arianna Davis acusó a la intérprete de Juice de avergonzarla y señalarla por su peso,  después de un show en el festival South by Southwest.

Noelle Rodriguez declaró que la coreógrafa se metió con sus creencias religiosas y quiso inculcarle las suyas.

Ni Lizzo ni Quigley: La productora Big Grrrl Big Touring también está demandada por racismo y discriminación por tratar diferente a los bailarines negros, a lo que la compañía respondió llamándolos “flojos y poco profesionales”.