Historias de San Francisco

Historias de San Francisco

Sin mayor pretensión, me parece que es una historia que en su trasfondo busca enaltecer el grupo LGBT+.

Muestra una sociedad, quizás un tanto extrema, pues son personajes libres y auténticos, desde las butches más butches hasta dragas, pasando por ositos y personas trans. El abanico de los colores del arcoíris en un mismo episodio.

Nos abre la ventana también a una de las ciudades que se ha convertido en un emblema del movimiento LGBT+ en el mundo. Su apertura desde los primeros movimientos por los derechos de esta comunidad.

Una ciudad y una serie que representan a toda la comunidad, aquellos que, quienes nos guste o no, forman parte de lo que somos ahora.

Discursos que sacan a relucir la crisis sanitaria de finales de los 80 y principios de los 90, que sin duda marcaron a una sociedad y a una época. Que fueron parteaguas para la discriminación y estigmatización de personas que, solo por ser como son sufrieron, pero que como también lo indican discursos de la serie, fueron parte de la lucha para que ahora seamos un poco más libres.

Se adentra en la crítica a las nuevas generaciones, que si bien han sido transgresoras en algunos sentidos, en otros hemos sido más bien privilegiados, nos tocó vivir en panoramas más seguros y abiertos, gracias a la lucha de aquellas generaciones que fueron perseguidas, golpeadas y asesinadas solo por ser como eran.

Es cierto qué hay sitios en el mundo donde aún ocurren estas injusticias, afortunadamente, ya son menos.

Series como esta nos ayudan a visibilizarnos más como personas que como extraños de la sociedad, que las diferencias porque nos guste, chocolate, vainilla, fresa o todos no nos hacen más o menos, extraños o depravados como en algún momento de creyó.

Nos va abriendo camino para que amemos sin culpa y bailemos con libertad.

Ser parte de la comunidad LGBT+ me hace especial, aún en esta época, ser parte de ella significa que eres un poco más fuerte que el resto, porque desgraciadamente aún faltan derechos y batallas por ganar.

A pesar de lo que digan algunos y de ciertos avances que se han logrado en igualdad de derechos, tener que salir del closet cada que se entra en un grupo social, implica retos que heteros no enfrentan, habrá algunos a quienes no les importe, y otros que ni le den importancia, pero es una realidad que se tiene que afrontar y que requiere valor en cada ocasión.

Sin duda creo que asumirnos como parte de esta comunidad requiere de valor, ¿quien no ha sufrido discriminación? Levantarse a cada uno de estos episodios requiere también coraje y si estos actos de la sociedad no nos han hecho menos, nada lo hará.

La libertad y equidad nos harán más fuertes como individuos y sociedades. Vivir en lugares más incluyentes nos hará mejores seres humanos.

Volviendo a “historias de San Francisco” considero que es una serie que homenajea a quienes en su momento lucharon por los derechos de toda la comunidad.

En uno de las ciudades emblemáticas, menciona sitios y batallas que dieron miembros de la comunidad, muestra la evolución de lugares y causas, como el sitio feminista libre que en una época fue bar gay, luego punto de reunión de dragas y ahora lugar feminista.

Los lugares que evolucionan por la causa del momento, el constante cambio de una compleja sociedad.

Bien por Netflix por revivir una serie como esta, ya veremos las otras Historias de San Francisco, más del origen de esta gran comunidad.

Queramos o no, somos parte de ese universo multicolor, lleno de gente amorosa, fuerte, valiente, feliz. ¿Y a qué venimos si no es a ser felices?

Vivamos, amemos y sonriamos libremente.

Escrita por Mayte Alejandra