Cosa de franceses: Museos de arte y pasteles. Así fue como un sujeto disfrazado de una persona de la tercera edad, lanzó un ‘pastelazo’ a la más emblemática pintura renacentista de todos los tiempos, La Gioconda.
Con peluca y sombrero, un joven vestido de anciana en silla de ruedas evadió seguridad y arrojó la tarta con betún blanco (de sabor desconocido) a la pintura de 519 años en el museo parisino.
¡Sacrebleu, La Gioconda arruinada!
El intento para perturbar la imagen de la pintura de Leonardo Da Vinci únicamente afectó el cristal antibalas que protege la obra de arte. Luego de cumplir su cometido, fue escoltado por el equipo de seguridad del Louvre.
En esta ocasión, la guerra de pasteles en contra de la Monna Lisa fue ¿a favor del medio ambiente? Así como lo lees, el atacante se nombró en pro de la ecología y el planeta Tierra.
“Piensa en la Tierra, hay personas que están destruyendo el planeta, piensen en el planeta, todos los artistas, piensen en el planeta, por eso hice eso, piensen en el planeta.”
De hecho, no es la primera vez en que la obra de arte sufre un ataque por parte de los visitantes, ya que en 1956 le echaron ácido, en 1974 pintura roja y en 2009 una taza de té.
La Gioconda es una pintura en óleo creada por el visionario renacentista Leonardo Da Vinci. La misteriosa mujer retratada fue Lisa Gherardini, una noble proveniente de Florencia.
¡Pastelazo a la francesa!